Quiso la mala suerte que no pudiera acogerles en mis suelos. Un viaje preparado con tanta antelación y llegaron el mismo día que yo me despedía de mi incómoda cama y de la mía casa.

Pero Raquel y Ramón son todoterreno, asi que ya prevenidos de la posible ausencia de poder garrapateador, habían reservado alojamiento en un hostal de la zona noroeste, en zona 2 y dispuestos a todo.

Hostal en pleno refurbishment, con tele pero sin enchufe, con bañera pero sin ducha. Nada ensombrece el ánimo de los pequeños hobbits.

Poco tiempo para quejarse. Hay mucho que ver y hay que comprimir el paquete básico contratado con la Agencia Izquierdo de Londres en dos días. ¿Y eso que implica?. Basicamente andar andar y andar. Y si ya os quejabais los que tuvisteis más tiempo, tullidos todos vosotros, amigos de las visitas relajadas, imaginaos a estos pobres sufridores en sesión comprimida.

Pero no juzguen con predisposición hacia lo negativo, que el esfuerzo fue grande, pero se les preparó para ello. Grandes dosis de fish&Chips, Vindaloo de competi, alguna que otra hamburguesa, desayuno de los que requieren siesta a posterior…



… todo ello aderazado con alguna que otra pinta (o media pinta. Ejem). Se recomienda a los catadores del líquido ámbar menos exigentes, que prueben alguna vez en su vida la cerveza Cobra, de procedencia difusa en algún lugar de la India, y que se unan a algún grupo de terapia para comentar sus experiencias.

Para los amantes de los tours digitales les propongo el siguiente concurso. Si sois un afable lector de este blog o si llevais a Londres por bandera o si simplemente la sangre real inglesa corre por vuestras venas, no creo que tengais muchos problemas en reconocer estos sitios. Parte del tour, al que por supuesto estareis invitados a sufrir cuando vengais a acomodaros en un hostal o en mi casa, si la tuviera.




Gran visita de esta pareja de amigos, uno de los cuales fue mi compañero de desayunos de mi anterior trabajo y que llevan la risa por encima de todo. Les duela la rodilla, los pies, o les toque el violin una cucaracha para que se dejen caer en brazos del sueño.

Poco más que añadir. Se os debe una visita con suelo en vez de cama y con más comida y menos andar!!! Jajajajaja.

Se han fijado los audaces lectores ¿que Raquel sale siempre partiendose la caja en las fotos? Lo dicho. Alegría continua… 🙂