Es un pájaro? Es un avión? Un superhombre cayendo del espacio sideral a un mundo que no es el suyo y que le repudiará por ser diferente? Super-Neveitor? (¿?), Muñecuñao?

La respuesta como habreis podido imaginar es mucho más sencilla. Es uno de los cafres que ya por seguro conoceis pensando en su invulnerabilidad mientras hace del manto de nieve su colchoneta! 🙂 Porque que sería de la nieve si no se pudiera hacer el macaco loco? Lo mejor? Las guerras de bolazos de nieve! (SI!) Las volteretas imposibles y vergonzosas! (BIEN!) Los inofensivos saltos rídiculos! (UOOH!). Esto es como las posturitas delente del espejo. No se puede dejar de hacer!



Aunque a veces haya alguna piedra que decida ponerse entre nosotros y el éxito de un gran tirabuzón múltiple y se convierte en un culazo con moratón incluido. Jijijiji. Salude a su querida amiga la piedra con quien compartir un momento de intimidad en la caida! Jajaja!

Y tras perder nuestras dosis de invulnerabilidad y sentir la llamada del hambre no queda otro remedio que el abandonar los confines del bosque y volver al hogar, a la cueva, a ñampazampear y calentar las nalgas al arrullo del fuego.




Aunque sin duda, lo que vosotros estareis esperando será dejaros de ver simiescadas y babuinadas y ver algo del paisaje aunque fuera nublado. Ya sabeis que el doctor me recomienda hacer fotos para mantener mis constantes vitales…





No lamento para nada la niebla, ya había visto las montañas hasta donde se pierde la vista con anterioridad. Bonito disfraz.