Glen Coe 01

Nos acercamos ya a la parte final del viaje que aún había de traer bellas sorpresas. En especial atravesar el Glen Coe era una de las obligaciones del viaje. Uno de los valles más pintorescos de Escocia, y unos de los que más miedo dan, dicen, si el tiempo no acompaña.

Glen Coe 03

No fue nuestro caso y partimos de las inmediaciones de Fort William para atravesar sus motañas con un días que se dejaba querer. Dado que lo recorrimos de Oeste a Este lo primero que nos llamó la atención fueron los tres macizos que responden al nombre de las tres Hermanas, tan majestuosos que los rayos de sol que atravesaban las nubes les daban unos toques de luz y color que parecían salidos de un cuadro impresionista. Llegamos a ellos con la música de Braveheart de fondo, lo que en semejante compañía ponía los pelos como escarpias.

Glen Coe 05

Lamentamos, una vez más la falta de tiempo para no poder hacer algo de trekking por sus montañas y también lamentamos el no tener piernas de repuesto, pues la semi-victoria sobre el Ben Nevis se estaba cobrando un alto precio que nos hacía andar poco y como Robocop, agujeteados cada músculo para nuestra vergüenza y regocijo de los montes.

Glen Coe 07

La segunda parte del valles está dominada por el Buachaille Etive Mòr (el pastor del Etive), de pico afilado que da origen a otros cuantos valles colindantes. Todas estas montañas fueron regadas con sangre en la mañana del 13 de Febrero de 1692, cuando 37 miembros del clan de los MacDonald fueron asesinados por los mismos a los que habían ofrecido alojamiento por negarse a aceptar a Guillermo III de Inglaterra como soberano.

Glen Coe 08

Pero no sólo en la realidad sino también en la ficción han tenido lugar batallas en sus campos. Braveheart, Los inmortales, Rob Roy, El prisionero de Azkaban y hasta los Caballeros de la Mesa Cuadrada lo han utilizado de escenario y con mucha razón. Es realmente espectacular.

Glen Coe 06

Si lo comparamos con el Glen Torridon, creo que el hecho de tener una carretera seria y asfaltada atravesándolo, le resta gran parte del encanto que tenía el primero, aunque las montañas tienes una profundidad y un dramatismo que no tenía el valle del Torridon. Supongo que lo mejor es que cuando vayáis veáis los dos para comparar! 🙂

Glen Coe 11

Y a la salida, nos esperaba el páramo de Rannoch. 130 km2 de llanura, flanqueada por pequeñas montañas adornadas, como si fueran tartas con un poco de nata, por nubes de algodón.

Rannoch Moor 01

Rannoch Moor 03