Volviendo de los acantilados de Arrigunaga, bajamos a la orilla de la ría, a comer en el puerto deportivo. Comilona esta vez de tenedor, cuchillo y babero.



Desde allí, paseito tranquilo para bajar la comida. 🙂 Hasta el Gran Puente Colgante de Bizkaia que conecta las dos margenes del la ría de Nervión y une Portugalete con Getxo.

La curiosidad de este puente es que dispone de una barquilla transbordadora que es la que transporta gente y vehículos de un lado a otro. Se hizo de este modo para no entorpecer a la circulación de los barcos y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO el 13 de Julio de 2006.

Los más osados decidimos pasar por la parte superior, que puede ser cruzada en una estructura de madera que deja ver entre tus pies el agua en la lejanía mientras ves a la barquilla pasando por debajo de ti y los barcos y barcas se cruzan. :S Genial para el vértigo.


Acabamos en Portugalete, tomandonos los ultimos cacharritos y rememorando todo lo que había dado de sí el fin de semana.

Desde aquí dar las gracias a Álvaro y a Patricia por toda la organización de este magnífico evento. Fue una pasada de fin de semana. Muchísimas gracias!!!